Fotos e informe: 33.ª vigilia mensual por el cierre de Guantánamo en
Estados Unidos y en todo el mundo
12 de octubre de 2025
Andy Worthington
Fotos de las vigilias mensuales mundiales por el cierre de Guantánamo el 1 de octubre de 2025. En el
sentido de las agujas del reloj desde la parte superior izquierda: Londres, Los
Ángeles, Bruselas y Detroit.
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El pasado miércoles 1 de octubre, los activistas más comprometidos del mundo con el cierre de la prisión
de la "guerra contra el terrorismo" en la bahía de Guantánamo se
reunieron en lugares emblemáticos de Estados Unidos y de todo el mundo para
celebrar la 33ª vigilia mensual coordinada consecutiva “Close Guantánamo"
(Cerrad Guantánamo) en Washington D. C., Londres, Nueva York, San Francisco,
Bruselas, Ciudad de México, Portland, Detroit, Los Ángeles y Belgrado. Los
activistas de Irvine (California) celebraron una vigilia en un recinto cerrado,
y el formidable bastión progresista de Cobleskill (Nueva York) siguió su
ejemplo el sábado 4 de octubre.
Las vigilias mensuales del "primer miércoles" cuentan con la participación de activistas de
varios grupos de Amnistía Internacional,
Close Guantánamo, la UK Guantánamo Network, Witness
Against Torture, World Can't Wait,
Peacemakers of Schoharie County y varios grupos activistas de la ciudad de
Nueva York, con el apoyo de numerosas organizaciones más.
Como siempre, estoy inmensamente orgulloso de nuestra pequeña familia global de activistas, todos
los cuales reconocen la importancia de la injusticia perdurable de Guantánamo y
su influencia nefasta en las políticas de detención brutales e injustas desde Israel
hasta El
Salvador y, más recientemente, el territorio continental de los Estados
Unidos, a través de la expansión de centros de detención fundamentalmente
ilegales gestionados por el ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas)
como parte de la maligna "guerra contra los migrantes" que Donald
Trump lanzó cuando asumió el cargo en enero.
A continuación pueden ver fotos y comentarios de las vigilias (solo falta Nueva York, ya que,
lamentablemente, nadie tomó fotos de la concentración en las escaleras de la
Biblioteca Pública de Nueva York en Manhattan), y leer mi último análisis sobre
el uso cínico que Trump hace de Guantánamo como escenario periférico de
crueldad en su “guerra contra los migrantes", en la que, de forma
aterradora, están reviviendo los horrores de la «guerra contra el
terrorismo" en suelo estadounidense, y a una escala verdaderamente
colosal, esta vez tratando a los inmigrantes, en lugar de a los musulmanes,
como “terroristas", y secuestrándolos y, a menudo,
“desapareciéndolos" extrajudicialmente, en una traición fundamental a las
protecciones que se supone que se aplican a todas las personas en el territorio
continental de Estados Unidos.
Activistas en Parliament Square, Londres, el 1 de octubre de 2025. Otros activistas, que no aparecen en
la foto, se encontraban en las inmediaciones repartiendo folletos a los
transeúntes. (Foto: Andy Worthington).
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Activistas borrosos frente a la Casa Blanca en Washington, D.C., el 1 de octubre de 2025. Helen
Schietinger, de Witness Against Torture, escribió: “Estaba totalmente
obsesionada con la flotilla de Gaza, así que, por desgracia, la foto está
borrosa. No la miré después de que la persona la tomara, como suelo hacer. El
hombre que la tomó dijo que era fotoperiodista, así que confié en su ojo.
Quizás tenía miedo de que lo vieran hablando con nosotros, por lo que le
temblaban las manos".
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Activistas en San Francisco, en el distrito Mission, en la calle 22, el 1 de octubre de 2025, en
una evocadora fotografía tomada al atardecer. Gavrilah Wells, en el centro,
escribió: "Se unieron a nosotros algunos veteranos de la vigilia, así como
nuevas personas encantadoras que aportaron energía fresca y mejoraron enormemente
nuestra pequeña vigilia en Misión".
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Activistas en Bruselas el 1 de octubre de 2025, que se habían trasladado desde su ubicación habitual,
frente al Parlamento Europeo, a la Place de la Monnaie, donde repartieron
folletos en los que se establecía un paralelismo entre la situación de los
presos de Guantánamo y la de los presos palestinos en las cárceles israelíes.
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Activistas en Terry Schrunk Plaza, en Portland, Oregón, el 1 de octubre de 2025. Foto tomada de la página
de Facebook del organizador y coordinador de Veteranos por la Paz, Dan Shea (a
la derecha en la foto).
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Nat y Alli en la vigilia frente a la embajada de Estados Unidos en Ciudad de México el 1 de octubre de 2025.
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Julie Alley, defensora desde hace mucho tiempo del cierre de Guantánamo, en la vigilia celebrada en
Los Ángeles el 1 de octubre de 2025. Su colega Jon Krampner escribió: “En el
espíritu de Halloween, Julie Alley y yo hemos rondado el edificio federal de
Westwood durante una hora esta mañana. Recibimos algunos bocinazos y comentarios
de agradecimiento de los conductores que circulaban por Wilshire Boulevard; es
posible que un tipo nos hiciera alguna crítica constructiva, pero no se
expresaba muy bien, así que no pudimos entender muy bien lo que decía. Julie se
había lesionado la mano, pero acudió de todos modos, lo que la convirtió en un
ejemplo de valentía y firmeza activista".
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Activistas frente al Edificio Federal en Detroit el 1 de octubre de 2025. La organizadora Geraldine
Grunow dijo: “Seis de nosotros, en un hermoso día en Detroit. Nos animaron las
bocinas de apoyo de muchos coches, un autobús y un autobús turístico. Habíamos
pensado en trasladarnos a la acera frente a las instalaciones del ICE cercanas,
donde todos los miércoles hay una vigilia a favor de los inmigrantes que es más
visible que la nuestra. Sin embargo, varias personas pensaron que no era una
idea acertada, así que nos quedamos donde estábamos. Mis mejores deseos para
todos los que han participado hoy y muchas gracias por organizarnos".
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El ex preso de Guantánamo Mansoor Adayfi realizó una vigilia en solitario en Belgrado el 1 de octubre de 2025.
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Dorrine Marshall, defensora
desde hace mucho tiempo del cierre de Guantánamo, se unió a nosotros en una
vigilia en interiores en Irvine, California.
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Activistas de Cobleskill, Nueva York, se unieron a nosotros el 4 de octubre de 2025. Sue Spivack
escribió: “Quince activistas se manifestaron el sábado 4 de octubre, desde las
11 de la mañana hasta el mediodía, en la vigilia semanal de Peacemakers of
Schoharie County. Pedimos el cierre inmediato de la prisión de Guantánamo y la
liberación de los 15 presos actuales de la “«guerra contra el terrorismo"
en circunstancias que cierren equitativamente su caso, y en general defendemos
los derechos humanos y el fin del encarcelamiento sin cargos ni juicio de
cualquier persona detenida por cualquier agencia de los Estados Unidos. Gracias
por coordinar estos eventos".
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En los ocho fatídicos meses transcurridos desde que Donald Trump regresó a la Casa Blanca, los
15 prisioneros de la "guerra contra el terrorismo" que aún
permanecen recluidos han desaparecido en gran medida de la vista pública,
invisibilizados por el aspirante a presidente tiránico, que se apoderó de la
base naval como escenario para ejercer una crueldad perforante en su “guerra
contra los migrantes", ordenando al Departamento de Defensa y al
Departamento de Seguridad Nacional que se prepararan
para albergar allí hasta 30 000 migrantes, planes que, afortunadamente,
nunca se materializaron.
Sin embargo, a partir de febrero, los primeros de los que, hasta la fecha, han sido menos de 700
migrantes recluidos en Guantánamo fueron trasladados en avión a la base naval,
algunos recluidos en un centro de operaciones para migrantes ya existente,
utilizado para retener a los migrantes interceptados en el mar desde la década
de 1990, y otros
recluidos, ilegalmente, en el Campamento 6 de la prisión de la “guerra contra
el terrorismo”, que, por ley, solo puede utilizarse para retener a presos
presuntamente detenidos en relación con los atentados del 11 de septiembre, Al
Qaeda y otras organizaciones terroristas.
Ante los retos
legales, Trump se deshizo
de todos los primeros migrantes retenidos en Guantánamo —178 venezolanos—
en cuestión de semanas, enviando a todos menos uno de vuelta a Venezuela. Sin
embargo, en los meses siguientes siguieron llegando más migrantes, en menor
número y procedentes de diversos países, aunque todos ellos fueron
posteriormente deportados o devueltos al territorio continental de Estados
Unidos.
En junio, surgieron informes de que Trump amenazaba una vez más con aumentar masivamente la
población migrante en Guantánamo, supuestamente con la intención de enviar allí
a 9000 hombres, entre ellos 800 europeos. En ese momento especulé
que la noticia había sido una filtración interna, diseñada para que los planes
se abandonaran debido a la furia de los líderes europeos, quienes, como era de
esperar, en muchos casos se quejaron enérgicamente en público por esta
flagrante afrenta a la diplomacia.
Sin embargo, en julio surgieron más noticias inquietantes, que revelaban que, en ese momento, había
72 migrantes detenidos, 26 de los cuales habían sido seleccionados para
recibir una atención especial por parte del Departamento de Seguridad Nacional,
que publicó una
lista con un título sensacionalista en la que los describía como “los
peores de los peores extranjeros ilegales condenados por delitos”, y facilitaba
sus nombres, nacionalidades y los presuntos delitos por los que habían sido
condenados. Los hombres procedían de diversos países, principalmente de América
Central y del Sur y del Sudeste Asiático, aunque también había personas del
Reino Unido y Rumanía.
La decisión de centrarse en los presuntos condenados se había tomado evidentemente porque la administración
había sido humillada en repetidas ocasiones, al quedar en evidencia una y otra
vez por mentir sobre la mayoría de los hombres que había detenido, a los que
describía habitualmente como miembros de bandas y «criminales atroces»
basándose únicamente en el hecho de que tenían tatuajes. En todos los casos,
revelados por abogados, investigadores y periodistas, sus familiares habían
demostrado que su único “delito" había sido emprender peligrosos viajes en
busca de trabajo en la tierra prometida de los Estados Unidos.
La decisión de centrarse en los presuntos condenados resultaba especialmente inquietante porque coincidía
con los exitosos esfuerzos del Gobierno por deportar a los migrantes no a sus
países de origen, sino a terceros países (concretamente, Sudán del Sur y
Esuatini), sin ninguna
de las garantías exigidas por el derecho internacional humanitario para
asegurar que no fueran víctimas de abusos, torturas, “desapariciones" o
incluso asesinatos.
Sin embargo, a pesar de mis esfuerzos por dar a conocer la precaria situación en la que se encontraban
estos 26 hombres en Guantánamo, nadie siguió la historia, los intentos de
seguir las pistas no llevaron a ninguna parte y la historia pronto se hundió
sin dejar rastro.
No fue hasta el día después de nuestras vigilias, el 2 de octubre, cuando Carol Rosenberg informó en el New
York Times de que todos los migrantes retenidos durante el verano
habían sido trasladados y no quedaba ninguno, aunque, por supuesto, no hay
garantía de que no lleguen más en el futuro.
Como explicó Rosenberg, el 1 de octubre, cuando se celebraban nuestras vigilias, los últimos 18 migrantes
detenidos fueron trasladados en un vuelo chárter al territorio continental de
Estados Unidos. Según afirmó, “se desconocía su destino final, pero las
autoridades de inmigración han trasladado en el pasado a migrantes de vuelta a
Estados Unidos para consolidar los vuelos de deportación".
Para aclarar aún más la historia de los migrantes retenidos durante el verano, Rosenberg explicó que, a
finales de julio, había 61 migrantes detenidos, pero que, desde entonces, 16
vuelos del ICE habían “recogido a los deportados, ya fuera para devolverlos a
Estados Unidos o para añadirlos a vuelos que ya llevaban a otros migrantes y
continuar hacia otros países".
Añadió que, según Thomas Cartwright, que realiza un seguimiento de las deportaciones con el grupo de
defensa de los derechos de los inmigrantes Witness at the Border, “sus destinos
incluían Colombia, Ecuador, Egipto, El Salvador, Inglaterra, Guatemala,
Honduras, India, Laos, Nigeria, Rumania, San Cristóbal, Sierra Leona y Vietnam".
Sin duda, algunas de estas deportaciones incluían a los 26 hombres que figuran en la lista publicada por
el DHS, entre los que destaca el ciudadano británico, aunque, al igual que
ocurrió con su llegada a Guantánamo y su encarcelamiento durante el verano,
ningún medio de comunicación británico ha hecho referencia alguna a él.
Hubo un tiempo en que un ciudadano británico detenido en Guantánamo, incluso uno presuntamente condenado
por pedofilia, habría sido una noticia de gran relevancia, pero ahora se ha
perdido en un torbellino de indiferencia mediática y el caos permanente del desquiciado
mandato de Trump.
No puedo evitar preguntarme cuántas otras historias preocupantes están pasando desapercibidas.
* * * * *
A continuación pueden ver más fotos de las vigilias. Si pueden, únanse a nosotros en las próximas
vigilias del miércoles 5 de noviembre, coincidiendo con el primer aniversario
de la reelección de Trump, cuando están previstas importantes protestas en todo
Estados Unidos.
Otra foto de la vigilia en Londres. (Foto: Andy Worthington).
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Y otra foto de Londres.
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Una foto estupenda de San Francisco.
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Otra foto de San Francisco.
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Y otra foto de San Francisco.
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Otra foto de Bruselas, con Luk Vervaet explicando a un transeúnte para qué era la vigilia.
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Otra foto de Bruselas.
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Otra foto de Bruselas, con la pancarta mostrando solidaridad con los presos palestinos.
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Y otra foto de Bruselas, en la que se ve el folleto que repartían los activistas.
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Otra foto de Portland.
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Y otra foto de Portland, en la que Dan Shea pide que se ponga fin a la venta de armas estadounidenses a Israel.
Otra foto de la Ciudad de México.
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Otra foto de Ciudad de México, apuntando a la “guerra contra los migrantes" de Donald Trump y a
las instalaciones de Alligator Alcatraz, inauguradas en los Everglades de Florida.
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Y otra foto de Ciudad de México, burlándose de Donald Trump y Elon Musk.
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Jon Krampner en Los Ángeles.
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Y Jon Krampner buscando apoyo entre los conductores que pasan por Los Ángeles.
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Albert Valencia se une a nosotros en Irvine, California.
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Y, por último, para este mes, otra foto de Cobleskill, Nueva York, con Sue Spivack a la izquierda.
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